viernes, 21 de octubre de 2016

3ª PARADA: ODIO

DIARIO DE VIAJE

VIAJE 3: ODIO

Subimos al tren dejando atrás el sabor agridulce del amor. Pronto arranca y algo en el ambiente avisa que la nueva emoción no será tan placentera.

Una espesa y oscura niebla empieza a cubrir el paisaje de tonos rojos y rosados de la estación Amor. Esta densa bruma lo tapa todo y se cuela por las ventanillas del tren. Respiramos y la niebla empieza a penetrar en nuestro cuerpo. Comenzamos a sentir como cambian nuestras ideas. La neblina está envenenando nuestros pensamientos.

De los laterales de los asientos se abren unas puertecitas que nos ofrecen una bebida. No tengo mucha sed, pero decido beber por cortesía. Tomo el vaso y lo llevo a mis labios, un trago es suficiente para empezar a notar el amargor del líquido. Intento deshacerme del mal sabor escupiendo y frotándome la lengua con la mano, pero ya es tarde. Noto como la amargura del brebaje empieza a correr por las venas y a adentrarse en mis entrañas.

Una voz cortante anuncia con desprecio la siguiente parada: Odio.

El cuadro de Artemisia, Judith, preside la estación. El ária de la Reina de la noche, La venganza del infierno hierve en mi corazón, de la ópera la Flauta Mágica de Mozart viaja junto con la niebla hasta nuestros oídos.

La secuenciación de la actividad ha sido la misma que en las dos anteriores (ternura y amor).
Después de la pequeña introducción del trayecto hemos leído la definición de Odio que aparece en el Emocionario. A continuación se ha abierto una pequeña tertulia donde han explicado las situaciones o cosas les generan odio.

Entre los ganadores del odio se encuentra la mayonesa, seguida por los exámenes y las arañas (sinceramente, la mayonesa me ha sorprendido... la verdad es que mis diez acompañantes nunca dejan de sorprenderme y ese es uno de los encantos de esta profesión).

Han obervado el cuadro y han destacado el claroscuro de la imagen. Esta vez es una mujer la autora de la obra, Artemisia. No es muy habitual encontrar mujeres pintoras en esa época y desde la escuela debemos visibilizarlas.

He contextualizado el fragmento musical que iban a escuchar explicando brevemente el argumento de la flauta mágica y el papel de la Reina de la Noche. Después de la audición alguno ha comentado que no le ha ayudado a sentir odio, no lograba identificarlo en ese música. Entonces he decidido mostrarles un enlace donde puede verse el fragmento y además aparece subtitulado. Os dejo el enlace porque os puede resultar muy útil ya que con este recurso sí que he conseguido que todos sientan la emoción que estabámos trabajando.
Han finalizado la actividad dibujando en las fichas aquello que les genera odio.

Abandonamos esta estación y nos preparamos para la siguiente: Ira.

No hay comentarios:

Publicar un comentario